Lo del PSOE no sólo es
asimetría en el trato según a quién se le aplique, es también asimétricamente
estrábico a la hora de mirar unidireccional o bidireccionalmente, una vez más,
según de quién se trate. Tomás Gómez en Madrid, por ejemplo, o Chaves y Griñán
en Andalucía, han sido objeto de estas distintas miradas y trato.
Veamos sino por qué al
primero, sin estar imputado, se le ha fulminado de un plumazo, mientras que a
los otros dos, que si lo están, hay que esperar, se nos dice, a saber de qué se
les imputa exactamente. El criterio seguido con Gómez apeló formalmente al hedor
que el tranvía de Parla proyectaba sobre las pésimas expectativas electorales
que anunciaban los augures mediáticos, los mismos que 24 horas después ya
tenían cocinada una encuesta de «urgencia» según la cual su descabalgamiento
había comportado un aumento del 8%. Curiosamente, los mismos oráculos anuncian
un mantenimiento sostenido del PSOE en Andalucía, cuyas irrespirables miasmas
extienden sus pútridos efluvios mucho más allá que un tranvía de pueblo y
alcanzan hasta la misma médula espinal del «régimen». Porque, a ver, que Susana
Díaz no sepa nada, y ni se le pregunte, es como cuando Mas –a éste sí se le
está empezando a preguntar- asegura que nunca se enteró de los turbios manejos
de los Pujol en su propia consejería cuando era el responsable de las
adjudicaciones de la obra pública catalana. Debía ser el único que no se
enteró; como Susanita… De ser así, ambos, ex
aequo, se merecen el premio babero de oro… con cuchara.
Y aunque uno no pueda
abandonar la sospecha de que, andando como anduvo, según parece ser, entre
oráculos el juego, los balbuceos de la pitia hayan sido interpretados con
raseros muy distintos según el caso, aceptemos ello no obstante, como hipótesis
de trabajo, que acaso haya sido su condición de gafe la razón que motivó la
defenestración de Gómez. Si fuera así, lo de la corrupción sería entonces una
variable aleatoria que para nada, o casi nada, habría influido en la decisión
de liquidar a uno y mantener a los «otros». Expectativas electorales y punto.
Gómez era un perdedor con cenizo y ni cien mil primarias justificarían la
previsible debacle electoral. Chaves y Griñán, por el contrario, en su calidad
de espadones en la reserva y aupadores del caballo ganador–siempre según las
encuestas- merecen que se concrete de qué se les imputa, como si no se supiera.
Porque lo importante son los resultados. A eso se le llama pragmatismo. Bien.
Claro que, según este
criterio, no entiende uno entonces qué hace Iceta al frente del PSC, o por qué
en las federaciones donde los socialistas llevan más tiempo que en Madrid sin
comerse una rosca –caso de Valencia o tantas otras-, no se han adoptado medidas
similares. Si la cosa iba de oráculos y augures en lo anterior, aquí
probablemente habría que recurrir a los insondables misterios de Eleusis para
entenderlo.
Porque de lo contrario no se
entiende que, habiendo Gómez ganado varias primarias y no estando imputado, se
le pase por las horcas caudinas y se observen, en cambio, tantas
contemplaciones y deferencias con el par de golfos que son Chaves y Griñán.
Ya sólo faltaba que Copito de
Nieve nos desvelara hoy los misterios de Eleusis psoecialistas en un impagable artículo, tan inmundo como cínico. Sí, definitivamente, se han creído que somos
imbéciles. Y lo peor de todo es que hasta puede que tengan razón.
Y aunque no la tengan, querido Xavier, vendrán legiones de imbéciles a dársela. Enhorabuena por el magnífico artículo y un saludo.
ResponEliminaMuchas gracias Manuel. Y un abrazo.
EliminaXavier, interpretación de la decapitación de Gómez en clave docente: Pedro Sánchez ha actuado como ese profesor cobarde, débil e inepto que un día, consciente y avergonzado de su inutilidad, decide escenificar un golpe de autoridad y, como es cobarde y débil, solo puede hacerlo arreándole un guantazo al más infeliz, con lo que, además de no ganar autoridad, se le sigue percibiendo como cobarde, débil e inepto, y ahora, encima, injusto y arbitrario. Este "golpe de autoridad" ya se le está volviendo en contra, por no hablar de otra cosa: ya veremos lo que cosecha el ínclito Gabilondo en Madrid.
ResponEliminaCierto, querido guachimán, el ejemplo del profesor cobarde no puede ser más ilustrativo. Y estoy completamente de acuerdo en que se le está volviendo en contra. Los cismas i las subsiguientes purgas siempre debilitan, al menos en democracia, así que ya puede PRISA ir amañando encuestas para su candidato Gabilondo y para el tertuliano Carmona. Más dura será la caída.
EliminaUn abrazo.
A mí es que me dan mucha penica. Lo de Carmona mueve a la compasión, cristiana o laica, lo mismo da. Será que estoy aprendiendo a empatizar...un artículo espléndido.
ResponEliminaSi, cierto, lo de Carmona no puede mover sino a la compasión, el pobre. Con las ganas que tiene de ser alcalde de Madrid y va a ser que no.
ResponEliminaEstas preguntas que haces en tu articulo son las que me hicieron pedir la baja del PSC. En mi época de estudiante me comentaron que el profesor Francisco Canals y Vidal vino a dar un curso sobre el Criterium de Santo Tomas de Aquino a una empresa de muebles de Tarragona (que por cierto se llamaba Muebles Tarragona) y que después del curso aumentaron sus ventas. No se si recomendarles que contraten a alguno de los alumnos aventajados del profesor para que les de unas clases o les deje sus apuntes sobre el tema. Seguro que me dirán que con los años la empresa acabo cerrando. Sí quizás sea mejor no dilatar el cierre de esta empresa política que es el PSC.
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